Sostenibilidad: definición, objetivos, resistencias

Este término, ciertamente el más leído, escrito, discutido, visto en la televisión y el tema de estudios y discusiones en los congresos, ahora está entrando en el vocabulario de todos, es relativamente reciente: nació en la década de 1980 cuando (era 1987, para ser precisos) el Informe de la Comisión Mundial «Nuestro Futuro Común» para el medio ambiente de la ONU definió «desarrollo sostenible», el que «puede asegurar la satisfacción de las necesidades de la generación actual, sin comprometer la posibilidad de las generaciones futuras «.

Dado que el concepto básico de esta idea es que los recursos de la planeta no son infinitos y por lo tanto deben ser respetados y empleado de manera responsable, tres son los elementos que son su esencia: la economía (preservando el crecimiento y el
desarrollo), la igualdad (calidad de vida, seguridad y protección, y para todas las personas), y el medio ambiente (asegurando la disponibilidad y calidad de los recursos del planeta). En 1993 la Unión Europea ha añadido una cuarta: la biodiversidad (productividad en la eco-agricultura sin dañar otras eco-sistemas).

No cabe duda de que el desarrollo sostenible sólo puede lograrse si se compatibiliza el desarrollo de las actividades económicas con la protección del medio ambiente, es decir, cuando los cuatro elementos anteriores trabajan juntos, de forma armoniosa y simultánea.

Infinitos son los caminos que conducen a esta meta: mencionamos sólo algunos de ellos, los más sugeridos y esperados:

  • El abandono definitivo de las fuentes fósiles y el uso de la energías renovables (sostenibilidad energética)
  • Información y educación para un comportamiento consciente y responsable (consumo sostenible)
  • Rediseño urbano con criterios de respeto social y ambiental (las llamadas «ciudades sostenibles»)
  • Eficiencia y respeto en el uso de los recursos (producción industrial sostenible)
  • Comportamiento virtuoso del individuo y de la comunidad donde se encuentra elegir estilos de vida respetuosos con los recursos del ecosistema (sostenibilidad de las comunidades).

La lista podría continuar, pero hay que decir que este discurso no es de ninguna manera generalmente compartido: todavía hay quien creen que este es un modelo de desarrollo anti-crecimiento, o una amenaza potencial a la libertad, soberanía o
independencia. Están además los escépticos del cambio climático (los llamados negadores), que van en contra al 99% de los científicos y en contra de la evidencia de los eventos desastrosos de nuestro día.

Ya no se puede perder más tiempo: ¡debemos actuar! Afortunadamente, los principios del desarrollo sostenible se están siguiendo siempre por más personas, que los aplican a la práctica diaria: la sostenibilidad se convierte así en una brújula para el comportamiento de tantos (que pronto serán mayoría), que de esta manera contribuyen a la preservación del medio ambiente para las generaciones futuras.

Feliz 2020 de la redacción de Viu la Bici : que sea realmente un año más sostenible para el medio ambiente y para todos nosotros.